25 sept 2015
Del SONETO XLIII DE W. SHAKESPEARE.
23 sept 2015
LA CASADA INFIEL de Federico García Lorca
LA CASADA INFIEL
Y que yo me la llevé al río
creyendo que era mozuela,
pero tenía marido.
Fue la noche de Santiago
y casi por compromiso.
Se apagaron los faroles
y se encendieron los grillos.
En las últimas esquinas
toqué sus pechos dormidos,
y se me abrieron de pronto
como ramos de jacintos.
El almidón de su enagua
me sonaba en el oído,
como una pieza de seda
rasgada por diez cuchillos.
Sin luz de plata en sus copas
los árboles han crecido
y un horizonte de perros
ladra muy lejos del río.
Pasadas las zarzamoras,
los juncos y los espinos,
bajo su mata de pelo
hice un hoyo sobre el limo.
Yo me quité la corbata.
Ella se quitó el vestido.
Yo el cinturón con revólver.
Ella sus cuatro corpiños.
Ni nardos ni caracolas
tienen el cutis tan fino,
ni los cristales con luna
relumbran con ese brillo.
Sus muslos se me escapaban
como peces sorprendidos,
la mitad llenos de lumbre,
la mitad llenos de frío.
Aquella noche corrí
el mejor de los caminos,
montado en potra de nácar
sin bridas y sin estribos.
No quiero decir, por hombre,
las cosas que ella me dijo.
La luz del entendimiento
me hace ser muy comedido.
Sucia de besos y arena
yo me la llevé del río.
Con el aire se batían
las espadas de los lirios.
Me porté como quién soy.
Como un gitano legítimo.
Le regalé un costurero
grande, de raso pajizo,
y no quise enamorarme
porque teniendo marido
me dijo que era mozuela
cuando la llevaba al río.
(Federico García Lorca)
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15 sept 2015
NANAS DE LA CEBOLLA. Poema de MIGUEL HERNÁNDEZ.
La cebolla
es escarcha
cerrada y
pobre:
escarcha de
tus días
y de mis
noches.
Hambre y
cebolla:
hielo negro
y escarcha
grande y
redonda.
En la cuna
del hambre
mi niño
estaba.
Con sangre
de cebolla
se
amamantaba.
Pero tu
sangre,
escarchada
de azúcar,
cebolla y
hambre.
Una mujer
morena,
resuelta en
luna,
se derrama
hilo a hilo
sobre la
cuna.
Ríete, niño,
que te
tragas la luna
cuando es
preciso.
Alondra de
mi casa,
ríete mucho.
Es tu risa
en los ojos
la luz del
mundo.
Ríete tanto
que en el
alma al oírte,
bata el
espacio.
Tu risa me
hace libre,
me pone
alas.
Soledades me
quita,
cárcel me
arranca.
Boca que
vuela,
corazón que
en tus labios
relampaguea.
Es tu risa
la espada
más
victoriosa.
Vencedor de
las flores
y las
alondras.
Rival del
sol.
Porvenir de
mis huesos
y de mi
amor.
La carne
aleteante,
súbito el
párpado,
el vivir
como nunca
coloreado.
¡Cuánto
jilguero
se remonta,
aletea,
desde tu
cuerpo!
Desperté de
ser niño.
Nunca
despiertes.
Triste llevo
la boca.
Ríete
siempre.
Siempre en
la cuna,
defendiendo
la risa
pluma por
pluma.
Ser de vuelo
tan alto,
tan
extendido,
que tu carne
parece
cielo
cernido.
¡Si yo
pudiera
remontarme
al origen
de tu
carrera!
Al octavo
mes ríes
con cinco
azahares.
Con cinco
diminutas
ferocidades.
Con cinco
dientes
como cinco
jazmines
adolescentes.
Frontera de
los besos
serán
mañana,
cuando en la
dentadura
sientas un
arma.
Sientas un
fuego
correr
dientes abajo
buscando el
centro.
Vuela niño
en la doble
luna del
pecho.
Él, triste
de cebolla.
Tú,
satisfecho.
No te
derrumbes.
No sepas lo
que pasa
ni lo que
ocurre.
3 sept 2015
A MÍ NO ME IMPORTA de Gloria Fuertes
A mí no me importa
que alguien me llore,
cuando me llegue la muerte.
Lo que necesito
es que alguien me ría
mientras me llega la vida.
— G.Fuentes
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